domingo, 4 de octubre de 2020

IDEAS DE ESPACIO

Ideas de Espacio.- La idea de espacio ha estado implícita siempre en Arquitectura. (Finalidad, uso, función.) De modo explícito aparece a finales del siglo XIX. Se ligó desde el principio a ella, la idea de tiempo o recorrido. Esto, lo precisa bien Geoffrey Scott en su texto “La arquitectura del humanismo” en uno de sus apartes: “La arquitectura nos da espacios que utilizamos. Y aquí se encuentra el verdadero núcleo del arte arquitectónico. Éste tiene el monopolio del espacio…” y continúa “…el arquitecto modela el espacio como el escultor la arcilla, y diseña su espacio como obra de arte; es decir trata de provocar a través de él una cierta sensación en quien lo penetra. ¿Qué método utiliza? El movimiento, de nuevo. De hecho el espacio es libertad de movimiento.” Por su parte Luis I. Kahn, nos dice: La arquitectura es la estudiada construcción de espacios. ¿Es la arquitectura el arte del espacio? La masa, los sólidos delimitan el espacio y están a su servicio. En una visión funcionalista el espacio es el principal objetivo. La masa al servicio del vacío ha sido la idea que sustenta la primacía de la idea de espacio en arquitectura. La masa ha venido ganando, en algunas corrientes un valor casi igual al del espacio mismo. Sin duda lo corpóreo es un objetivo clave de la arquitectura, ya que es lo visible, lo tangible y proporcionable, lo que materializa… lo que posibilita. En las tendencias más ponderadas “posmodernas”, materia y forma corpórea son al menos equivalentes al espacio que crean y con la forma espacial que delimitan: espacio + forma corpórea + gente interactuando en y con aquellos…con cualidades espaciales y de la materialidad corpórea. ¿Estamos ante la aceptación de una conjunción estética = Masa + Espacio + gente? Espacio y volúmenes con interpenetración de ambos: Lo cóncavo tridimensional delimitado con materia, lo convexo rodeado de espacio y sus interpenetraciones rítmicas, (¿Eróticas?) interactuando con los seres humanos que habitan, usan contemplan y recorren de modo dinámico. ¿Neo-barroco? El espacio conformado, abierto o cerrado, y su relación correcta entre vacíos y masas que le definen ha sido esencial en arquitectura, con mayor valor de uno u otro según la cultura y época: Máxima corporeidad en lo clásico occidental y mínima en algunas tendencias contemporáneas. Si minimizáramos o elimináramos las formas corpóreas, haciéndolas tender a 0, obtendríamos una forma espacial en estado puro… esto seria posible lograrlo cada vez más con los estados de la tecnología actual…con el uso , por ejemplo de membranas, mallas o superficies perforadas, como forma corpórea delimitante de espacios fluidos, intercomunicados e interactuantes con el exterior y el cosmos… El planeta todo, de pronto con la excepción del agua, está disponible para la creación espacial y ofrece a todos los espacios su suelo: el plano de base originario, en donde se tienen y soportan todas las arquitecturas. Los seres humanos parados en el plano de base, hacemos una vertical, proyectando un eje que va al centro del planeta. Hacia arriba la frontera son las estrellas. El “plano de base” horizontal, o quebrado es el primer límite espacial… todos los demás límites los creamos desde cero, los construimos… a veces con materiales, a veces sólo como campos de fuerzas. De la importancia y prelación del plano de base se deriva la importancia de la “Planta”, que es el origen espacial, el lugar ¿geométrico? donde los espacios se concretan. Sobre el suelo trazamos, replanteamos, excavamos, hilamos y marcamos lo que generará tanto vacíos, como sólidos que les definen… abiertos a la luz. Las arquitecturas contienen espacios “anclados” en tierra; así, lo temporal les afecta mediante la interacción con seres humanos. Nosotros somos creadores y protagonistas, activadores del espacio. La arquitectura son fragmentos especiales de la realidad, que creamos al delimitar sobre el plano de base o suelo. Sobre este suelo está el “medio” o la extensión tridimensional que concretamos con objetos… esto es un tanto el resultado concretado de las ideas de Leibniz: Un sistema de relaciones entre las cosas coexistentes…cosas reconocibles como fenómenos…la forma espacial y su contenido, creados por la arquitectura… que percibidos y apreciados devienen en valores estéticos. Tal forma espacial es medible y localizable por coordenadas x, y, z, y construible con infinidad de materiales y métodos. La forma espacial y su contenido son el habitáculo humano, el abrigo en este planeta, que nos brinda el arte de construir. Formas espaciales cuyos elementos: muros, bóvedas, cimientos, composición y disposición en la planta originadora y su contenido programático, buscan la conveniencia, la economía, la estética. La planta es pues, la esencia de la composición espacial, la generatriz…que con superficies y volúmenes concretan la arquitectura y estas, reciben señas, ornamentos, cobijan personas y mobiliarios, posibilitan decorados… sin olvidar el principio canónico: La masa debe estar al servicio de los vacíos. La forma material, la masa, envuelve lo esencial del espacio, su estructura formal, su estructura geométrica. Las relaciones fundamentales de las arquitecturas son: Relación con el suelo, o plano de base, relación con otros edificios asociados o exentos y/o naturaleza circundante, relación con el cielo y el cosmos… Tradicionalmente la estética de la arquitectura y las artes plásticas, atendía sólo las cualidades en superficies y volúmenes de las formas corpóreas. Estas también eran las apreciadas por los habitantes, usuarios y público en general. La importancia progresiva de la función o utilidad, y lo explícito del valor espacial hizo que se valoraran cada vez más las cualidades espaciales en sí. Estas cualidades dependen mucho de la luz, escala, proporción… y de la forma corpórea delimitante, la cual es valorada integralmente con la forma espacial. En esta valoración, la utilidad, finalidad o función es hoy un parámetro indispensable…

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