Revisando mis libros, encontré el de la torre de Babel, G.Gili, Barcelona, 1970, de Quaroni, justo cuando se cumple el centenario de su autor.
El libro compendia seis ensayos cuyo tema único es el “diseño” de la ciudad moderna.
Ellos son: 1-Necesidad y posibilidad de control de la forma urbana, por el arquitecto.2- El “diseño” para la ciudad. 3- La proyectación de la ciudad. 4- Nuevos espacios para nuevos contenidos.5-Diseño y forma.6- Objeto y proyecto.
Al final presenta un buen número de gráficas de calidad.
La introducción estuvo a cargo de Aldo Rossi, quien animó a Quaroni a “convertir en pública razón, sus embrolladas divagaciones”.
Para Quaroni el arquitecto es el homo poeticus, o sea, el artista que produce los objetos formales que constituyen la ciudad. Sobre tal objeto escribe Quaroni: “Objeto y proyecto para la ciudad, objeto arquitectónico proyectado como autónomo. Proyecto para edificios y para la ciudad, de formas de relación entre formas y espacios, de estructura de formas para una estructura de vida”.
En la época de quaroni se hablaba de mixed development, de construcciones abiertas y aisladas con tipos mezclados, lo cual suponía un sistema más fuerte, variado y expresivo. La exageración de fragmentos y la anulación de la unidad de composición, llevó a la crisis esta idea.
Quaroni defendía la importancia de la relación entre las partes urbanas y la especificidad del hecho arquitectónico-urbanístico.
El vocablo urbanismo, stadtebau en alemán, y town planning en Inglaterra, intenta definir algo, que todo arquitecto sabe: Que los problemas de la ciudad y de su diseño son asunto del arquitecto. Quaroni nos recuerda que el concepto de di-seño conlleva imaginación y creación de organismos urbanos y arquitectónicos y su comunicación a través de gráficas.
Toda ciudad requiere cantidades enormes de di-seño. La proyectación integral se basa y apoya en el diseño. (Quaroni nos habla del proyecto-di-seño de la metrópolis y de la ciudad y, de urbanística).Para él, la planeación, casi siempre trasciende la arquitectura: Es cosa de funcionarios.
Quaroni pensó, estudio y enseñó, sobre el carácter y futuro de la ciudad.
Pienso que sobre todo él fue ejemplo del “activista” que se comprometió con los problemas sociales, con la vivienda de bajos ingresos y la pobreza, pero trascendió la dimensión populista y continuó siendo arquitecto y estudiando y haciendo arquitectura mientras y hasta que pudo.
A pesar de lo controvertida que fue su obra, (Por ecléctica), dejó huella como docente y unos proyectos urbanos que reordenaban la topografía de la ciudad.
El libro que aquí comentamos, describe la metrópolis del futuro y anticipa la fascinación que ella causa hoy. Él fue de los primeros en reconocer “lo feo” de la ciudad moderna, sin retornar al paradigma de la antigua, para encontrar belleza.
Su aporte principal fue sobre el futuro y carácter de la ciudad: Para algunos fue el teórico de las utopías urbanas.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario